Cuarentenas

Con la llegada de un nuevo pollito o loro a casa todos estamos muy felices. El nuevo inquilino es preciosímo, hace cosas muy graciosas y tenemos que ocuparnos más de él (el nido, los bañitos, las papillas, probar nuevas cosas, que se sale del nido) que del otro loro más grande y viejo, que seguramente ya está bien enseñado.

Lo realmente importante con la llegada de un nuevo pollito, es la cuarentena.
Claro que no digo que lo otro no sea importante, sociabilizar con él, alimentarlo y cuidarlo también lo es. Pero de nada nos sirve todo esto, sin una controlada y rigurosa cuarentena.

¿Dé qué se trata esto?

La cuarentena es el tiempo que comienza desde que llega nuestro pollito (o adulto) a casa hasta los siguientes 40 días.


 ¿Para qué sirve?

En este tiempo aislaremos totalmente al nuevo pollo (o adulto).
Teniéndolo aislado se podrá controlar posibles síntomas de enfermedad y evitaremos que, en caso de estar enfermo, contagie a nuestras otras aves. En este tiempo también haremos los controles veterinarios necesarios y, de ser requerido, se administrará tratamiento, quizás extendiendo la cuarentena hasta finalizar el tratamiento otorgado por el veterinario en exóticos.

¿Cómo la realizaremos?

•  Ubicaremos al pollo en un nido (o al adulto en una jaula apropiada) en una habitación ventilada, con luz solar indirecta (ventanal) y temperatura estable, donde no estén otras aves, y en lo posible donde no estén los miembros de nuestra familia. Esta habitación deberá permanecer con la puerta cerrada la mayor cantidad de tiempo posible
• La habitación permanecerá ventilada el mayor tiempo posible.
• UNA sola persona se encargará de alimentarlo, limpiarlo, tratarlo, sociabilizarlo, etc. Recuerda que el nuevo amiguito está asustado por su viaje y no se comportará normalmente los primeros días. Se pueden usar ojotas de goma para entrar y salir de la habitación, dejar las ojotas siempre en el mismo lugar, por ejemplo en la puerta de la entrada a la habitación, para evitar la diseminación de bacterias y viruses.
• El lugar será desinfectado con agua y lavandina todos los días, incluyendo el piso, el lugar donde esté el nuevo loro y el ambiente. Evitando usar aerosoles desinfectantes (Ayudin, Lisoform) ya que afecta seriamente el sistema respiratorio de nuestro loro. 
• El nido, jaula, comederos, basura… será limpiado en un lugar distinto al que utilizamos para el loro que ya teníamos, por ejemplo… si lavamos los accesorios del loro viejo en la cocina, los del nuevo serán lavados en el baño.
• NO pasar comederos, bebederos, juguetes, jaula, transportín, etc entre el pollito o el loro nuevo con los loros que ya tenemos. Esto también es una forma de contaminación cruzada.
• Los útiles que usaremos para higienizar serán estrictamente de esa habitación. Y permanecerán allí hasta que termine la cuarentena. Una vez finalizada, se desinfectará todo con lavandina y secado al sol.
• Si una persona ajena a la casa necesita entrar a la habitación asignada para el nuevo lorito (personal de limpieza, electricista, plomero, etc) seguirá las mismas normas de higiene. Se le pueden dar las mismas ojotas de goma para no desparramar bacterias y viruses por la casa. 

Ya han pasado los 40 días o más si se administró tratamiento… ¿Qué haremos ahora?

El siguiente paso será hacer un nuevo control veterinario. Si todo está bien, entonces podemos integrar a nuestro nuevo loro al resto de la familia.